Artículos
Music Bank Chile 2022: ¿Dónde quedó el milagro?
El concierto, que estaba anunciado como «el milagro del regreso del K-POP» y como «un nuevo comienzo», se transformó en una noche de dulce y agraz para la fanaticada de la música coreana en Chile.
El sábado 12 de noviembre se vislumbraba como una gran jornada musical en la capital de nuestro país. Por una parte y además de los innumerables conciertos de música nacional que se realizaban en distintos locales, también aterrizaba en Santiago en la comuna de Cerrillos el Primavera Sound, mientras que en el Estadio Monumental de Macul, y luego de cuatro años, volvía lo que es uno de los shows más importante para el público que sigue el K-pop a nivel mundial: el Music Bank.
¿Qué es el Music Bank, también llamado Mubank? el nombre viene de un programa que se emite por la televisión coreana desde 1998 dedicado a las bandas (o más bien, a los llamados «idols») y que releva lo que está ocurriendo con este fenómeno musical y cultural. Cada cierto tiempo, el programa se traduce en una gira de algunas de estas bandas, habitualmente las más conocidas del momento junto a otras en proceso de desarrollo, que visitan diversos países alrededor del mundo, en un evento que toma el nombre de Music Bank World Tour y del que se han realizado 14 versiones, siendo Chile el país donde más veces se han producido (3). Esto no debiera sorprendernos, porque hace ya más una década que el K-Pop es un fenómeno muy potente en nuestro país, que lamentablemente muchos medios dedicados a la música no cubren pues lo consideran un fenómeno pasajero. Nada más lejano de la realidad, pues el K-pop es una industria gigante fuertemente establecida en Chile que mueve millones en todos los sentidos: en dinero, en canciones, en seguidores, pero también en sueños y esperanzas.
Noviembre 2022, Macul, Santiago: Lo vivido como experiencia
Luego de una acreditación de prensa expedita, en la que recibimos una hermosa caja con los logos de la productora Noix que contiene la credencial y un pin que dice Music Bank, entramos al concierto bajo un cielo amenazante de lluvia unos treinta minutos antes del inicio, que estaba agendado para las 20 hrs. Sin embargo, la jornada para lxs asistentes había iniciado mucho más temprano: casi diez horas antes ya había comenzado la apertura de puertas para la zona VIP, lo que significó que no faltaran personas que durmieran afuera del Estadio o llegaran durante la madrugada para asegurar su ingreso a esta experiencia. El concierto publicitaba entradas para galería ($35.000), galería lateral ($45.000), cordillera ($60.000) y cancha ($50.000) , más dos sectores numerados, llamados Océano ($110.000), Rapa Nui ($145.000) y un último espacio más caro llamado Dreamers ($160.000, todos los valores indicados no consideran cargo por servicio).
La oferta de la productora a quienes compraran el VIP Experience (o sea el ticket Dreamers) era ingreso a un sector especial donde desde las 8:00 am recibirían regalos conmemorativos, acceso a una zona de relajación, con food trucks, K- Beauty (que es otro gran negocio que llega desde Corea), entretención (juegos), zona de fan clubs (para que pudieran reunirse y coordinar los proyectos que realizan concierto a concierto para rendir homenaje a sus artistas que incluyen pancartas, cánticos, regalos, etc.) y un escenario con concursos y otras actividades. Además, al comprar este ticket se aseguraba que recibirían una pulsera con un número asignado para ingresar posteriormente al sector del concierto, sin filas ni aglomeraciones.
Son las 19:30 de la tarde y estamos ingresando al sector VIP en la cancha del Estadio Monumental, mientras las pantallas pasan videos de las bandas que más tarde veremos en vivo. Miles de adolescentes gritan ensordecedoramente, liberando la energía que han acumulado por meses desde que se anunció este evento. La mayor parte de ellxs lleva en sus manos lightsticks, que son un tipo de merchandising especial para los conciertos con diseños y colores característicos de cada banda. Ninguna persona en esta cancha se ha quedado corta en preparativos, llevando sus mejores outfits en una verdadera cita entre fans y bandas.
Si bien el concierto estaba anunciado para las 20 hrs, son las 20:30 cuando comienza. Antes de eso, presenciamos una prueba técnica de efectos especiales, cosa que nos sorprende, pues suponemos que toda prueba de algún tipo se realiza con mayor antelación. No ha subido ninguna banda y ya escuchamos gritos desde un sector de la cancha pidiendo ayuda porque había personas aplastadas.
A las 20:30 y poco después que la productora coreana KBS repartiera capas ligeras para la lluvia entre la cancha VIP, se inicia una cuenta regresiva la que da paso a un video sobre Music Bank, que hizo hincapié en los «tres años sin encuentro por pandemia» y habla de «milagro» repetidamente. Luego de esto, Rowoon, MC coreano de esta jornada, actor y idol, sube al escenario para presentar a las bandas de la noche, las que ingresan a medida que las anuncian junto a un huaso que llevaba un estandarte con el nombre de cada grupo: StayC, TXT, (G)I-dle, The Boyz, NCT Dream, sin embargo, el sexto grupo anunciado en el cartel, ATEEZ, no sube a pesar que sí lo hizo su huaso con estandarte. La productora pasadas las 19 hrs. había subido un mensaje a su instagram anunciando que la banda acababa de llegar al país.
La primera banda en presentarse fue The Boyz, quienes interpretaron cuatro canciones bajo una leve lluvia, además de dirigirse al público y realizar una actividad, en la que intentaron bailar cueca. Y decimos intentaron porque si bien se agradece el esfuerzo de hacer un gesto hacia el país donde se encuentran, la verdad se notaba la falta de preparación para un baile que tampoco es particularmente fácil si no se ensaya. Ponerse chupalla, poncho y pañuelo no es igual a bailar cueca. Personalmente no conocíamos las canciones de The Boyz, pero generaban una energía potente que daban ganas de salir saltando en medio del público.
Luego fue el turno de StayC, grupo femenino, que partió con un interesante mini remix, pero a quienes lamentablemente no pudimos apreciar en la primera y segunda canción por la forma en que estaba armado el escenario, ya que éste consistía de un escenario principal techado muy alto que para quienes estábamos en la cancha VIP no permitía ver el show del grupo, teniendo que conformarnos con verlo en las pantallas. El show de StayC nos pareció interesante en el apoyo de visuales pues incluían cuatro por canción, especialmente en Run2U, a diferencia de The Boyz que mantuvo una visual estática por cada tema, lo que restaba dinamismo a su propuesta. StayC mantuvo el formato de cuatro canciones y una actividad, en la que realizaron un Kpop Random Dance, esto es, poner un coro de cualquier canción de K-pop y bailar la coreografía, primero ellas, luego las cámaras apuntando al público, en un verdadero challenge en vivo.
Luego que StayC bajara del escenario, Princesa Alba, quien se había sumado como MC, junto a Rowoon y a Yuqi, de (G)I-dle,, comenzaron un relato en el que relevaban la importancia de los hitos musicales latinos, para dar paso a una intervención musical de los dos grupos que ya se habían presentando en la que The Boyz interpretó «Despacito» y StayC «Mi gente». Los covers funcionaron bien y el público los disfrutó, sin embargo en nuestro caso, el que cantaran «Despacito» fue poco novedoso por cuanto Taemin en el Music Bank en Chile de 2018 ya había hecho la misma canción. El cover de StayC funcionó mejor, mientras el cielo ya había pasado de llovizna a lluvia con ganas. Entre canción y canción subía personal de aseo a «barrer» el agua, generando molestia de algunas personas al lado de los escenarios, porque en ciertos momentos esa agua les cayó directamente.
Subió (G)I-dle, interpretaron un tema y cuando iban a hablar al público las cámaras de los lados comenzaron a fallar, dejando solo los subtítulos sin imágenes. Fue en medio de la segunda canción que el agua ya caía a cántaros. Al grupo se le hacía difícil realizar las coreografías pues en varios momentos se les vió resbalar. En el tercer tema, la lluvia se transformó en granizo, sin embargo, la banda siguió con la canción hasta el final, a pesar que ya con estas condiciones una de las integrantes cayó al suelo. Luego de esta situación, la banda volvió a camarines y se anunció que se realizaría una pausa de 10 minutos para luego retomar el concierto. Los 10 minutos se transformaron en por lo menos una media hora, en la que aprovechamos de comprar comida y ponernos a resguardo de la lluvia.
Luego de esta pausa, que se hizo la verdad bastante larga, una voz en off informó que los grupos saldrían a saludar, dando paso a una serie de disculpas de las bandas por no poder presentar la performance al nivel que ellos querían. Hasta ese momento no quedaba claro que el evento se cancelaba, las luces del escenario no estaban prendidas, excepto los seguidores que iluminaban a quienes estaban hablando, sin embargo, los últimos grupos dijeron explícitamente que se disculpaban por no poder actuar y que esperaban verse en una próxima oportunidad. En ese momento, se prendieron las luces del estadio y una parte del público comenzó a retirarse, mientras otra, la mayoría, lloraba desconsoladamente por no haber podido ver a sus grupos favoritos.
Comentarios post show y conclusiones varias
Cuando nos preparábamos como prensa para ir al evento, nos llamó la atención que las redes de la productora, específicamente su instagram, tenían limitados los comentarios, por lo que no fue posible realizar consultas a medida que avanzaba la jornada. Hacia la tarde-noche, se abrió nuevamente el feed y vimos cómo las publicaciones se llenaban de personas que hablaban de una serie de problemas logísticos que para ellos como asistentes les habían afectado, como son falta de información y de personal de control calificado para los ingresos, sobreventa de algunos de los sectores (sobretodo el Cordillera), incumplimiento del compromiso de acceso sin aglomeraciones por números asignados para el sector VIP (donde se habría generado una avalancha finalmente para entrar), falta de baños para la cantidad de personas, falta de personal de atención de salud, entre muchas otros descargos que pueden verse tanto en Twitter como en Instagram. La productora había asegurado antes del evento que había tomado todos los resguardos para que éste no se suspendiera en caso de lluvia.
A nivel artístico, hay que destacar que las bandas están en un muy buen nivel, la producción de sus shows es altísima en cuanto a visuales, coreografías, vestuario. Tremendos shows. Solo creemos importante mencionar que sería bueno que la productora coreana buscara otras formas de vincularse con el público chileno/latino que no sean solo los huasos o «Despacito», porque es una fórmula de verdad ya repetida concierto a concierto.
Una cosa que fue transversal a todo el concierto fue la necesidad de traducir las intervenciones de los grupos, lo que en otras ocasiones se había resuelto con traductores que acompañaban a las bandas. Sin embargo, en esta ocasión las traducciones iban en las pantallas y al parecer estaban predefinidas con un guión, causando que se perdiera gran parte del diálogo de los idols en sus presentaciones. Cuando subieron al final, les acompañó una traductora, pero incluso ahí la comunicación no fue expedita, pues a ratos ella comunicaba mensajes sin que ningún integrante de los grupos hubiera hablado previamente, poniendo en duda la veracidad y sinceridad de estos.
Desde Aldea Local creemos importante cubrir eventos que generan industria en nuestro país, independiente que sean grandes o pequeños. Los conciertos de K-pop se destacan por su calidad técnica, su equipamiento, incluso, el manejo del circuito cerrado de televisión dejaba en evidencia que los camarógrafos eran coreanos, pues tienen experiencia relatando visualmente las coreografías y cada detalle de los grupos que están grabando, de manera dinámica y hasta audaz. No es lo mismo ver una presentación grabada de BTS en Estados Unidos que una de Corea. Por eso creemos que es muy importante vivir la experiencia de este tipo de eventos para quienes trabajamos en la industria musical chilena, porque nos da la posibilidad de conocer el trabajo de una industria líder a nivel mundial en entretenimiento. Y sin ir más lejos, el 2018 ya habíamos asistido al show de Monsta X en Ñuñoa, el que fue a nivel técnico impecable.
Sin embargo, cuando se producen conciertos es importante que tres partes se sientan conformes: la productora, las bandas y también el público. Y en este caso más aún, pues el K-pop se alimenta de la lealtad de sus seguidores, quienes tienen tanta consciencia de lo importante que son, que son capaces de estar todo un día reproduciendo canciones en YouTube o Spotify cuando hay lanzamientos, para que la canción se posicione inmediatamente en las listas internacionales. Es en esto que el concierto de Music Bank se quedó corto, porque si bien se entiende la mala suerte de la lluvia, hay cientos de personas en redes que pagaron una entrada que están en este momento reclamando o amenazando con Sernac porque no se respetaron sus ubicaciones o no pudieron ver el espectáculo por la forma en que estaba dispuesto el escenario.
Creemos que no hay que hacerse cargo solo de convocar, sino también de todo el proceso hasta el final y en eso incluso el comunicado emitido hoy por parte de NOIX queda corto, porque no hace eco de los sentimientos que están expresando en cada red social de quienes fueron al evento. ¿Puede la productora evitar la lluvia? no. Pero sí puede evitar la desinformación de la que la culpan muchos de los asistentes o incluso pudo negociar adelantar el evento un par de horas, lo que habría significado una mejor experiencia. Por otro lado, creemos que si se realiza un evento con miles de asistentes que en promedio tienen 16 años es importante coordinarse con la autoridad pertinente para que haya acceso a metro y locomoción colectiva a la salida del mismo.
Noix es la empresa que ha realizado la mayor parte de los conciertos de este estilo en Chile y de verdad esperamos que sigan generando eventos de este tipo, pero también creemos que justamente para que esto ocurra hay que hacerse cargo de evaluar lo bueno y lo malo. Y lo malo de lo que fue el Music bank no lo estamos diciendo nosotros: lo están diciendo miles de comentarios en redes sociales de lxs asistentes, que no sintieron que fuera ni un nuevo comienzo ni un milagro.
Fotografías: ClaudioG – Maite Gutiérrez
Reporteo: Maite Gutiérrez
Edición de texto: Pamela Gaete
-
Noticias3 semanas ago
La primera Chingana SKA
-
Noticias6 días ago
PUNKX SENSIBLES: LANZAMIENTO DE GUMMO
-
Discos4 semanas ago
Música electrónica, guitarra, piano y mucho más: Mauripez libera video en vivo de su primer disco
-
Noticias4 semanas ago
Amaldita estrena la cumbia alternativa “Buscando un Rayito de Sol”
-
Escena4 semanas ago
PM Festival Poesía y Música anuncia la programación de su edición 2024 para celebrar su décimo aniversario
-
Noticias3 semanas ago
Festival We Rayün: la necesaria vitrina autoconvocada para la diversidad musical mapuche
-
Noticias4 semanas ago
Equinopsis se presentará en Valdivia este viernes 13 de septiembre junto a El Chon-Chon
-
Escena3 semanas ago
10 canciones sobre el amor tóxico y el proceso de sanar: “Espiral”, el nuevo álbum de Ciudad Nómade